Bicicleta plegable
El medio que hace más fácil el traslado por la ciudad
Intentar meterse en un tren hasta los topes con la bici suele ser una tarea ardua. Pero las bicicletas plegables han facilitado muchísimo esta labor. Al igual que sucede con las normales, estos modelos compactos los hay de todo tipo de formas y tamaños. Algunos se doblan horizontalmente, metiendo la rueda por debajo, mientras que otros doblan el manillar sobre la horquilla.
El truco está en las bisagras y vástagos extensibles que sustentan el cuadro. Cada bicicleta usa un tipo de bisagra distinta. Por ejemplo, el fabricante Dahon utiliza una bisagra fácil ViseGrip, y una bisagra LockJaw corta el cuadro en dos por el mismo centro.
La «Rolls-Royce» de las bicis plegables, la Brompton, que lleva en la calle desde 1975, se pliega en menos de 20 segundos, lo cual la convierte en el medio de transporte perfecto para la ciudad. Al plegarse en 58,5 centímetros de alto por 56,5 cm de largo y 27 cm de ancho, conserva su integridad estructural en un paquete compacto. Para que no queden atrapados en el cuadro plegable, las cadenas y cambios permanecen en el centro. Al doblarse horizontal o verticalmente, la Brompton queda plegada en un diseño propio e innovador.